Tipos de pieles y sus necesidades cutáneas
Como ya sabéis, después de un maquillaje o de tomar el sol en la playa de La Misericordia, debemos cuidar bien nuestra piel ante este tipo de agresiones externas. Pero antes de ello, en el mercado hay miles de cremas, con multitud de componentes que muchas veces tendremos que buscar por internet para conocerlos. Además, los anuncios en las vallas publicitarias o televisión nos hacen sentir la necesidad de comprar ese producto, sin nisiquiera conocer si pudiera ir bien a nuestro tipo de piel.
Cada cosmético viene con un prospecto o una etiqueta, donde nos informa de las indicaciones de ese producto y específica a qué tipo de piel va dirigida.
Para comenzar tenéis que averiguar qué tipo de rostro tenéis, avisamos que no es fácil verlo, pero os daremos una serie de características para que las podáis comparar.
A partir de ahora, esperemos que realicéis sin ninguna excusa, una rutina de cuidado facial ideal para vuestro tipo de piel, una para el día y otra para la noche.
Factores
La piel se puede ver afectada por las múltiples agresiones externas, y por ello se deben de tener en cuenta a la hora de elegir los productos adecuados para nuestra piel.
Estos factores pueden ser: el clima y la zona geográfica donde os encontréis, la edad de la persona, enfermedades como dermatitis o acné, y medicamentos que estéis tomando.
Piel normal
Suelen ser más comunes en niños y jóvenes, aunque si alguna vez os han dicho que tenéis una piel de porcelana o como un bebé, seguramente esta es la vuestra.
Se caracteriza por poseer suavidad al tacto, poros imperceptibles y es elástica. Además, tolera bien los jabones y, se puede apreciar una hidratación natural.
Para este tipo de pieles, debéis mantener la hidratación, por lo tanto ¡estáis de suerte! No necesitáis tener un armario lleno de cremas, como si tuvierais una farmacia en casa. Lo único será cuidar la piel durante una pequeña rutina de día y noche, con la que comenzaremos con un limpiador, seguiremos con un sérum y terminamos, con una crema hidratante.
Además de observar otras peculiaridades que presentéis, como piel sensible.
Piel seca
Esto se debe a una carencia de NMF, que es el factor de hidratación natural que presentan nuestras pieles. Hay tres grados de piel seca: alípica, deshidrata o xerosis. Todo depende de nuestros cuidados y protecciones frente a esas características.
Si vuestra piel presenta un aspecto con tendencia al enrojecimiento, poros poco perceptibles, descamación en zonas como las mejillas y áspera al tacto, seguramente es porque se da el caso de que tengáis una piel seca.
Debéis adquirir aquellos productos cosméticos, con principios activos hidratantes, que ayudan a suavizar y ablandar su dureza. ¡Tened cuidado con el maquillaje! pues estos productos agreden aún más a la hidratación de la piel, por ello seguir una rutina diaria adecuada y desmaquillarse correctamente, nos ayudará a mantener una piel en perfecto estado.
Piel grasa
Es aquella con exceso de secreción sebácea, suelen tener un aspecto luminoso, por su brillantez. Se caracterizan por observarse un brillo graso en varias zonas, poros perceptibles y un tacto grueso. Sus peculiaridades son, que broncea bien a la exposición solar y, no le afectan los cambios de temperatura.
Si presentáis piel grasa, debéis realizar una correcta higiene diaria, porque, aunque no utilicéis maquillaje, la piel se ensucia por la contaminación. Sabemos que suena un poco descabellado, pero probad por las noches a utilizar un limpiador o incluso un desmaquillante y un disco de algodón ¿veis que os sale suciedad? Por ello, os insistimos en limpiar la piel diariamente.
Además, elegid aquellos cosméticos para regular el sebo, consiguiendo un equilibrio deshaciéndonos del exceso de este.
Piel mixta
Es la más común. Se puede observar una diferencia de dos tipos de pieles en esta, por un lado brillo en la zona T (frente y nariz) esto se debe a un exceso de sebo. En cambio, en el área de las mejillas, posee un aspecto seco o normal.
Podéis notarlo observando frente a un espejo, que la piel es gruesa en la zona T. También, posee poros perceptibles en las zonas con grasa y un aspecto mate en las mejillas.
Vuestras necesidades cutáneas, serán dar prioridad a las zonas más afectadas por estas alteraciones, y utilizar los productos adecuados para cada zona. Pues, un producto hidratante le vendrá de perlas a las mejillas, pero, en la zona T se verá aún con más sebo.
Piel sensible
Esta no es un tipo de piel como tal, pero sí que afecta combinado con otro tipo de piel, es decir, podéis presentar piel sensible y a la vez piel normal o seca.
Son aquellas pieles fáciles de enrojecimiento, por ejemplo, ¿alguna vez habéis hecho uso de la cera en el rostro? Si ha sido así, ¿habéis notado enrojecimiento durante varias horas? Pues seguramente se trate porque vuestra piel es sensible.
La piel sensible no es aquella que duele al tocarla, como se puede pensar al leer su nombre, sino aquella que se ve más afectada frente a productos u otros factores como la depilación.
Para ello, elegid bien los productos que utilizáis, y si queréis probar nuevas fórmulas, investigad que no sean demasiado agresivas. Podéis probar depositando una pequeña cantidad sobre una zona del rostro, como puede ser en una mejilla, y observar cómo en unos minutos afecta ese producto a la piel.
Os recomendamos, que elijáis productos hipoalergénicos, que están pensados para no producir reacciones en la piel, por lo que encaja con las necesidades de vuestra piel.
Y vosotros, ¿qué tipo de piel presentáis? ¡Os leemos!
Autora del artículo: Celia Silió
Es muy importante cuidarse la piel y tenerla siempre bien hidratada
Yo tengo la piel muy seca y me pongo crema desde hace muchos años y aún así ahí va, imaginaos si no me la pusiera
De vital importancia tener nuestra piel cuidada, es la barrera contra agentes externos
Yo también me pongo mis cremitas y me mimo, cómo debe de ser 🙂 🙂
Pues yo tengo la piel grasa y utilizo una crema de una marca muy conocida (no digo nombre para no hacer publicidad…jajajaj) y me va muy bien, y obviamente me la pongo todos los días