Sandra García-Sanjuán: “Tenía claro que quería pasar por este mundo para dejar huella y hacer cosas importantes”

Hoy nos acercamos a una mujer muy especial, con las ideas muy claras, muy segura de sí misma y de lo que quiere conseguir en la vida. No le tiembla el pulso ni la voz, porque todo lo que dice y hace, está programado, meditado y estudiado, es por eso que hay poco o ningún margen para el error, porque la improvisación no entra en sus planes, hablamos de Sandra García – Sanjuán.

Sin embargo, para mi sorpresa, me encuentro con una persona cercana y sencilla, que degusta un zumo de frutas tan natural como ella, risueña a pesar del verano tan intenso de trabajo que lleva a sus espaldas y con ganas de seguir trabajando para llevar Starlite todavía más lejos. Estamos hablando de una mujer muy exitosa que no ha despegado los pies del suelo, que no se le ha subido la fama a la cabeza.

Cuando le preguntamos con que soñaba de pequeña, su respuesta es inmediata, “siempre quise ser empresaria, tenía claro que quería pasar por este mundo para dejar huella y hacer cosas importantes, dejar un legado y algo que valga la pena e impregne a mucha gente”, y además, Sandra García – Sanjuán puntualiza, que “para hacer cosas, primero debes soñarlas”.

Su gran secreto es disfrutar del trabajo que realiza, le encanta y se le nota cuando habla, porque el brillo de los ojos no se puede fingir y ella brilla.

Nos cuenta que su carrera la ha ido modelando día a día, que lleva años trabajando con celebrities y artistas de todo el mundo, concretamente desde que estaba haciendo la carrera de empresariales con tal solo 18 años y ya trabajaba. Con 20 años montó su empresa y lleva 27 años rodeada de artistas de toda la vida. Cuando empezó, le llamó mucho la atención que las celebrities fueran un referente y movilizaran a tantas personas, así que pensó en aprovechar eso para poder hacer muchas cosas a nivel social y poder transformar el mundo de una forma más expansiva.

Starlite es un proyecto que Sandra García – Sanjuán ha desarrollado a su medida y llegó el momento en el que dijo, “voy a organizar un festival para que puedan venir todos los artistas y recibirlos como en casa, teniendo un punto de encuentro donde estén todos”.

A ella siempre le ha gustado estar detrás de los flashes, haciendo que las cosas pasen, en bambalinas, manejando los hilos, aunque ahora, por Starlite, sea mucho más visible porque alguien debe hablar y representar el Festival, aunque nos aclara “pero soy un personaje público relativo, porque me mantengo bastante con mi vida privada, soy pública solo cuando estoy en el Festival, como empresaria, pero lo que a mí me gusta es estar detrás del show” sentencia Sandra.

Nos cuenta lo satisfactorio que resulta conseguir crear cosas impensables y que luego tenga una repercusión mediática y un poder transformador que define como “movilizaciones positivas”.

Una de las preguntas que tenía que caer es, ¿cómo te ha cambiado la vida Starlite? Pero una vez más, nos sorprende con su respuesta. Nos explica que ella ya estaba casada con su marido, que es un tipo extraordinario y con el que va de la mano, que los cimientos de su vida, ya los tenía, como las cosas importantes de la vida, que son, una familia fantástica, un marido que no cambiaría por nada del mundo y eso no ha variado. Prosigue diciendo, “hay gente que toma decisiones y elecciones en su vida porque en el momento que está, por conformismo o porque no pueden aspirar a más y eso es lo que les toca, cuando les cambia la vida a mejor, cambian todo, porque lo que tenían no les convence. En mi caso, tengo la suerte de que lo que tenía me encanta todo, me encanta mi familia, tengo amigos fantásticos, mi marido no me puede gustar más, que es mi compañero de vida, mi cómplice en todo, entonces al final, mi base no ha cambiado, me ha cambiado que el ser más pública me ha dado más capacidad de hacer más cosas, y me ha dado cierto poder, pero no me ha cambiado la vida, porque los cimientos los tenía y lo que importa lo tenía”.

También nos cuenta que lo de ser empresario es como un ADN, que el que es empresario, lo es desde pequeño, que es algo genético. Para Sandra, hay algo muy importante, alinear los negocios y las cosas que quieres hacer, pero no con el único objetivo de ganar dinero para uno mismo, ya que eso es lo menos importante para ella, su finalidad, es poder ganar dinero para reinvertirlo y poder hacer las cosas más grandes. “Ya tengo todo lo que necesito, vivo muy bien y nuestro objetivo, de mi marido y mío, que somos un equipo, es ganar dinero para invertirlo y hacer las cosas más grandes, lo importante en la vida, es las elecciones que haces en las cosas que son claves, las cosas en las que más tiempo dediques, la pareja con la que te cases, que es la persona con la que más horas pasarás, la familia y, los amigos, que son la familia que eliges”.

Sandra, nos asegura que cuando te rodeas de gente triunfadora, acabas teniendo éxito y, no es por casualidad, es porque esas personas arrastran a los demás en la forma de pensar, de ver la vida, influencian, inspiran y te hacen evolucionar hasta alcanzar tus sueños. También nos deja un ejemplo a la inversa y habla del típico chico que es la estrella en el colegio y se rodea de bufones para que le rían las gracias, explica que esa persona, se convertirá en alguien que no evoluciona, que no se da la oportunidad a si mismo de estar con personas que le reten, que se rodeará de gente mediocre y, tal vez, con 16 años pueda ser gracioso, pero con 40 se hace visible el estancamiento, la falta de metas en la vida.

Le preguntamos cómo se ve de aquí a 10 años ella y nos cuenta que un poco en la línea y la dirección de lo que está haciendo, pero más a otra dimensión. “Trabajando, pero con mi equipo, que tengo un muy buen equipo a mi alrededor, con una empresa mucho más… está muy consolidada ya, pero más consolidada todavía. Tengo 47 años, pero con 57 es que yo no puedo dejar de soñar, innovar, de pensar, para nosotros, cada año, el techo de un año se convierte en el escalón del siguiente, entonces cada año partimos de ahí y seguimos en esa dirección, así que dentro de diez años esto va a ser la meca de la música a nivel mundial”.

La siguiente pregunta que le hacemos es, si Sandra no estuviera en Starlite, ¿qué estaría haciendo? “Yo creo que hiciera lo que hiciera en la vida, siempre haría cosas de las que me sintiera orgullosa el día de mañana, que yo mañana mire atrás y diga, mira el legado que he dejado, mira lo que he hecho, mi paso por el mundo ha valido la pena” responde Sandra García – Sanjuán. El mensaje que nos deja es que no desaprovechemos la oportunidad de pasar por este mundo para nada, que si estamos aquí es para algo, que tenemos una misión, cada uno la suya y que nunca perdamos el niño o niña interior que poseemos, ya que es ese ser, el que tiene la necesidad de ayudar, de aportar, de colaborar, de hacer cosas por los demás y, cuando uno se va haciendo mayor y pierde ese niño que lleva dentro, las elecciones se vuelven mucho más egoístas, queriendo solamente dinero, pero ella comenta “el dinero para que lo quieres, solo es un medio para conseguir un fin, lo que debes tener claro, es que fin es el tuyo y después, buscar el medio”.

Sandra es una mujer con muchas inquietudes, así que damos por hecho que no tiene techo, la pregunta ahora es, ¿cómo seguirá evolucionando Starlite? No hay titubeo en su voz, su respuesta es rápida y rotunda, “ahora solo se ve la puntita del iceberg de lo que va a ser Starlite. Se ve menos de un 20% de en lo que se va a convertir. En cuatro años no lo reconoces, al final, se está convirtiendo en un referente mundial, ahora estamos haciendo un programa de televisión de 50 minutos cada semana… lo vamos a llevar a otra dimensión, lo vamos a convertir en un destino en sí, no va a ser solo un festival, va a ser mucho más y luego con la marca Starlite estamos haciendo muchas cosas alrededor, la marca de ropa , la marca Starlite y  la marca de distintas celebridades como Antonio Banderas, Alejandro Sanz, Valeria Mazza, Aerosmith, y también estamos en El Corte Inglés, en el Dutti Free…”

Queremos saber qué consejo daría a la gente que está empezando ahora con un proyecto, que es lo realmente importante para que salga adelante y Sandra, lo tiene más que claro, nos dice que lo primero a tener en cuenta es que hay mucho trabajo por hacer, que cuando uno quiere ser empresario, lo es 24h al día, “yo soy extremista, creo que no hay medias tintas, o sea, para mí, si realmente crees en algo, debes tirarte de cabeza, eso no quiere decir que te tires a una piscina vacía, no, debes hacerlo planificando, viendo, pero una vez que decides que se cumplen las cosas que necesitas, lanzarte de verdad” dictamina Sandra. A ella, no le vale la gente que dice, voy a probar, porque si solo lo intentan no les va a salir, es mejor que no lo intenten, que no pierdan el tiempo. Sandra nos comenta muy convencida “esta gente que dice, no, es que tengo miedo… si tienes miedo no lo intentes, si crees que no va a salir, no lo intentes, es que no pierdas un minuto porque no te va a salir”. Esto afirma la frase que dice, somos lo que pensamos y Sandra nos dice “los miedos, las inseguridades, la mayor limitación que tiene el ser humano es él mismo, son sus miedos, cuando uno piensa, esto no lo voy a conseguir, esto me da miedo, es que no lo va a conseguir”.

También nos cuenta que en su oficina está prohibida la palabra imposible, que no deja que nadie la pronuncie y cuando alguien la dice, Sandra responde, “bueno inténtalo, haz lo que tú puedas y, cuando ya no lo consigas y me digas que tú no eres capaz de conseguirlo, pídeme ayuda y veo como lo resolvemos”. Es así como consigue que se esfuercen y logren mucho más de lo que pensaban que podían conseguir. Sandra lo tiene claro “los intentos para mí son fracasos”.

La fundadora y promotora de Starlite, es de la opinión que todo el mundo puede llegar a ser lo que quiera en la vida, pero siempre a costa de algo, de esfuerzo, de visualizar lo que uno quiere ser y poner toda la carne en el asador y comenta como ejemplo a las familias Sánchez Vicario en el caso de los tenistas y los Fernández Ochoa como esquiadores. Ella explica que no es por casualidad que las dos familias se dediquen enteramente a lo mismo cada uno en su disciplina, si no, que, para ella, los padres dijeron vamos a hacer tenistas y esquiadores, pueden tener mejores cualidades o no, pero todos campeones, y eso es porque los padres los visualizaron desde pequeñitos y trabajaron para ello. Todo el mundo podría ser olímpico, pero para serlo se debe invertir horas en entrenamiento, se debe volcar toda una vida en conseguirlo, e incluso sacrificar cosas como salir de fiesta, hay que hacer muchas concesiones. La lectura es que se puede conseguir lo que se quiera y proponga teniendo en cuenta ciertas limitaciones que ya no dependan de uno. “Cuando se invierte mucho tiempo en algo las cosas salen. Lo que no vale es, yo quiero… pero luego nada” comenta Sandra García – Sanjuán.

Es súper ilusionante escuchar hablar a Sandra, es una mujer que irradia inteligencia, elegancia, generosidad y que demuestra sobradamente que está haciendo lo que le gusta, lo que le apasiona y que sabe lo que quiere hacer y hacia dónde va, que lo tiene todo planificado y cuando crees que lo que te cuenta es la bomba, te das cuenta de que todavía no ha hecho la explosión.

Os dejamos el Test con Alma que le hicimos a Sandra