Prepara tu baño perfecto
A todo el mundo le gusta un baño relajante al final del día, pero con el trabajo, la rutina y todo lo que hay que hacer a lo largo de la jornada, la gran mayoría opta por algo rápido. Aunque nunca viene mal pararse y darse un buen baño. Por eso hoy, os explicaremos cómo preparar vuestro baño perfecto con productos de casa. Seguid leyendo, ¡no os lo podéis perder!
Un baño relajante diario es muy beneficioso, ya que gracias a este podéis bajar vuestro nivel de estrés y de ansiedad. Además, también relaja los músculos, liberándolos de toda la tensión muscular y rigidez acumulada a lo largo del día. El agua caliente relaja y ayuda a desconectar durante unos minutos y que posteriormente podáis conciliar el sueño fácilmente.
A la hora de preparar un baño hay que tener en cuenta diferentes cosas, una de ellas es que el baño no puede durar más de veinte minutos y la temperatura del agua debe rondar los 36ºC, ya que si está más caliente puede secar la piel y romper su barrera protectora.
Algunos productos de casa que podéis utilizar para cuidaros y mimaros durante vuestros baños relajantes son las velas aromáticas o mascarillas faciales, del cuerpo y del cabello. Si no disponéis de ninguna mascarilla facial, podéis hacerla vosotros mismos. Dos mascarillas muy fáciles de hacer en casa porque los ingredientes que lleva son muy comunes en los hogares de todo el mundo, ya que una es de fresas y miel y la otra de pepino.
La mascarilla de fresas y miel se hace machacando varias fresas maduras y echando una cucharada de miel, después se mezcla todo hasta que queda una pasta que se coloca en la cara durante 20 minutos. La mascarilla de pepino se fabrica triturando el pepino hasta crear una pasta que después se extiende por el rostro y se deja reposar 15 minutos.
Para acompañar a las mascarillas faciales, podéis colocaros dos rodajas de pepino frías en los ojos que hidrata el contorno de estos y os ayudará a reducir las ojeras. Si no tenéis pepino en casa ¡no pasa nada!, también podéis utilizar dos bolsitas de té o manzanillas que se hayan usado previamente y estén frías.
Otros productos que podéis utilizar son sales de baño, agua con aromas para crear un ambiente que invite a la relajación o bombas de color para darle vida a vuestro baño relajante. Si no queréis cerrar los ojos durante vuestro baño, podéis coger una copa de vino, junto a vuestro libro favorito y leerlo durante el mismo. Para leer bien necesitaréis una barra de madera para apoyar el libro y que no se moje. La música puede ser muy relajante, por lo que reproducir en un altavoz una playlist de canciones para relajarse puede ayudar a que vuestro baño llegue a ser perfecto.
A la hora de comenzar el baño, en primer lugar, debéis daros una ducha rápida para eliminar las células muertas y la suciedad acumulada de todo el día. Después, debéis controlar la temperatura, que como hemos comentado anteriormente, tiene que rondar los 36ºC. Recordad siempre que la luz debe ser cálida, por lo que colocar velas y apagar la luz, siempre es una buena opción. Si en el momento en el que vayáis a entrar a la bañera, notáis el agua muy caliente, echad un poco de agua fría para equilibrar la temperatura y luego entrad tranquilamente.
Cuando estéis dentro ya podréis aplicaros vuestras mascarillas faciales. Además, si disponéis de aceites esenciales, es el mejor momento para aplicarlos mientras os hacéis un masaje que os ayudará a liberar las tensiones musculares por completo. Los aceites esenciales de lavanda relajan y los de eucalipto ayudan a despejar las vías nasales. Al salir del baño extenderos un poco de crema hidratante por todo vuestro cuerpo para eliminar la humedad y tengáis una piel muy bien hidratada. Otra cosa que podéis hacer tras el baño es haceros una pedicura, es decir, arreglaros las uñas de los pies y pintarlas del color que más os guste, ya que el mejor momento para arreglarse las uñas es después de un baño.
Ya conocéis cómo preparar vuestro baño perfecto, pero hay una cosa que no debéis olvidar: da igual el tiempo que dure el baño, tenéis que aseguraros que sea una experiencia que os ayude a relajaros y desconectar de todo durante unos minutos. Llegados a este punto, os invitamos a que nos contéis qué opináis sobre los baños relajantes, si os habéis dado alguno y cómo los preparáis. Nos gustaría saberlo, así que dejadlo todo en comentarios, ¡os leemos!
Autora del artículo: Paula Tejada Fuerte
Que bien poder meterse en una bañera, con sales de baño y una copita de vino…..ohhhhh!!!
Te copio la idea Rebeca, vaya placer, no??
Mi vida tú serías capaz de prepararme un bañito así luego a la noche?? 🙂 🙂
Por ti sabes que hago lo que me pidas, cariño mío TQM
Es que un buen baño al final del hoy para relajarse es el summum
He leído el comentario de Rebeca, y me voy ahí como las actrices de Hollywood….jeje….en plan femne fatal
Que bien sienta un baño relajante, es que te da la vida después de un día ajetreado
Es cierto que por nuestro ritmo de vida, cuando unx llega a casa, lo que suele hacer es pegarse una duchita, y anda que no sienta bien, pero no es comparable a darse un bañito en la bañera con tu agüita caliente, eso es placer en estado puro 🙂 🙂
Llevas más razón que un santo Irene, un baño está a otro nivel
Me acabais de poner los dientes largos, este finde me preparo un buen baño relajante y me doy ese capricho….jeje