Hierro para superar el bajón otoñal

El otoño trae consigo una sensación constante de cansancio, debilidad y fatiga física y psíquica.  La reducción del número de horas de luz, las temperaturas más frescas, la vuelta a la rutina y haber llevado una alimentación desordenada en verano puede afectar al organismo haciendo que los niveles de hemoglobina o glóbulos rojos sean más bajos, provocando anemia. Por eso, es muy importante suplementarse con hierro.

MABOSALUD, la línea de complementos alimenticios y cosmética de MABOFARMA, explica en qué consiste la deficiencia en hierro y cómo sacarle el mayor partido a la suplementación para recuperar la energía y disfrutar de sus otras (y muchas) bondades.

_De qué se encarga el hierro en el organismo. Es el rey de los minerales para que el cuerpo funcione. Se encarga de transportar la energía a todas las células, el oxígeno a los tejidos y es fundamental para el sistema nervioso. También, está involucrado en distintas funciones del metabolismo energético, la función cognitiva y sistema inmunológico. Un aporte de hierro adecuado es necesario para mantener un estado de salud y rendimiento óptimos.

_Síntomas. Los signos de deficiencia de hierro son fatiga, debilidad, baja temperatura corporal, dificultad de aprendizaje, deterioro de la función inmune, palidez, dolor de cabeza y mareos, cabello y piel secos y uñas frágiles y quebradizas.

_Quién lo suele padecer. Es muy común tener déficit de hierro ya que sus cantidades presentes en alimentos son muy pequeñas y no todas son absorbibles. Las mujeres son más propensas a presentar este déficit, debido a la menstruación y a los embarazos. Las personas que practican deporte con regularidad también pueden presentar falta de hierro, ya que el ejercicio físico requiere un mayor transporte de oxígeno y, por tanto, un mayor contenido de hemoglobina.

_Qué recomiendan los expertos. Además de una correcta suplementación, hay que priorizar el consumo de alimentos ricos en hierro con otros que contengan vitaminas A y C para que se absorba mejor. Por ejemplo, tomando legumbres con vegetales crudos, pescados o carnes como el pavo o el pollo con un toque de zumo de limón y cereales integrales

_Alimentos ricos en hierro. Especias como el tomillo, la albahaca o el eneldo, almejas, mejillones, legumbres como la soja o las lentejas, verduras como el kale o las espinacas, hígado de carne de vacuno…

_Suplementación. A la hora de suplementarse, es importante elegir productos que aseguren la máxima absorción y eficacia sin ningún efecto adverso ni molestias. Lo ideal es escoger aquellos que contengan principios activos liposomados que aseguran que los nutrientes del complemento alimenticio lleguen directamente al intestino y no entren en contacto con la mucosa gástrica. Es importante que, además de hierro, posean vitamina C, vitamina B12, ácido fólico y cobre que, en sinergia, se encargan de lograr una verdadera absorción.

_Cómo recuperar la energía. Es muy importante intentar mantener una alimentación sana y variada que cubra todas las necesidades nutricionales del cuerpo. La exposición a la luz solar es clave para aumentar los niveles de serotonina, un factor muy importante para reducir la sensación de cansancio a lo largo del día. Además, la actividad física diaria durante el día ayuda a sentirse lleno de energía durante el día y descansar mejor por la noche. También, conviene definir horarios fijos de descanso, para un sueño reparador y si se sufre de problemas de insomnio, recurrir a la melatonina.