Día Mundial de la Fisioterapia
El 8 de septiembre no sólo es el día de Nuestra Señora de la Victoria, patrona de la ciudad de Málaga, sino que los fisioterapeutas también celebramos, desde 1996, el Día Mundial de la Fisioterapia.
Mucho han cambiado las cosas desde entonces y ahora prácticamente todos hemos oído hablar de la fisioterapia aunque tal vez no tengamos muy claro cuál es su labor y cuándo deberíamos acudir a una consulta.
Aclaremos que el fisioterapeuta es un profesional sanitario con formación universitaria, el cual ofrece una alternativa terapéutica no farmacológica para prevenir y tratar lesiones y patologías mediante técnicas manuales, ejercicio terapéutico y la aplicación de medios físicos como el frío, calor, electricidad… frecuentemente se le relaciona con el masaje, pero el repertorio de técnicas terapéuticas es muchísimo más amplio.
Al igual que otros profesionales sanitarios, su labor abarca tanto la prevención, la educación para la salud y la curación de procesos como la recuperación de patologías ya instauradas y crónicas.
Frecuentemente me preguntan cuándo ir al fisioterapeuta y mi respuesta es “cualquier momento es bueno” por ejemplo, siempre que haya dolor, si sufrimos una lesión ya sea deportiva o como consecuencia de un accidente o intervención quirúrgica y cuando se ha perdido o existe el riesgo de perder el adecuado movimiento y las funciones físicas.
Por suerte la fisioterapia tiende a la especialización al igual que ocurre en medicina, ya que es imposible saber explorar y tratar cualquier alteración en el funcionamiento de todas las estructuras y órganos que componen nuestro cuerpo. Es más conocida la labor del fisioterapeuta en las lesiones relacionadas con huesos, músculos, ligamentos y tendones, pero podemos encontrarnos a profesionales especializados en el tratamiento de enfermedades respiratorias, neurológicas, alteraciones uroginecológicas y obstétricas, procesos oncológicos, patologías cardiacas y así hasta cubrir los distintos campos que abarca la Medicina.
¿Y cómo es la consulta? Antes de comenzar es obligatorio firmar unos consentimientos en cuanto a la protección de datos ya que el fisioterapeuta tendrá que hacer obligatoriamente una serie de preguntas y realizar una exploración física para comprender lo que le ocurre al paciente y poder establecer un diagnóstico que complementará al diagnóstico médico si existiera. Con los datos obtenidos en la entrevista y exploración física podrá proponer el tratamiento más adecuado o derivar a otros profesionales. En alguna ocasión me han pedido la aplicación de una técnica concreta sin valoración previa, esto sería como pedirle a un médico que realice una cirugía sin hacer una exploración y una serie de pruebas.
Una de las cosas más interesantes que ofrece la fisioterapia es la capacidad de ver al paciente en su globalidad y no centrarse exclusivamente en la zona donde por ejemplo refiere dolor. Esto nos ayuda a encontrar la causa sobre todo en aquellos casos donde el dolor y/o la disfunción han aparecido sin un traumatismo previo.
Otra de las preguntas frecuentes antes de acudir a la consulta es “¿me va a doler?” Por norma, respetamos la “Regla del No Dolor”, nuestra misión es disminuirlo en primer lugar antes de continuar con otros objetivos, pero en ocasiones, las técnicas aplicadas pueden ser molestas para lo que debemos avisar al paciente y pedir su permiso. También es cierto, que al finalizar la sesión, muchas veces persiste la molestia durante las horas siguientes, lo cual no es indicativo de haber procedido erróneamente.
Acudir a un fisioterapeuta tiene múltiples beneficios como el control del dolor, puede evitarnos pasar por un quirófano o acelerar el proceso de curación después de la cirugía, nos ayudará a mantenernos alejados de pastillas, mejorar la movilidad y el equilibrio, además de ayudarnos a conocer nuestro cuerpo y evitar lesiones.
En resumen, cualquiera puede acudir a un fisioterapeuta ya presente una lesión, dolor o disfunción como si quiere prevenir su aparición y no es necesario que lo prescriba un médico, a excepción de la Sanidad Pública donde por protocolo es el profesional médico quien hará la derivación.
El terapeuta cuenta con las herramientas necesarias para establecer un diagnóstico de fisioterapia y un tratamiento que complemente el diagnóstico y tratamiento de otros profesionales. Son muchos los beneficios que ofrece la fisioterapia utilizando medios en su mayoría nada agresivos y poco invasivos.
Los fisioterapeutas somos expertos en el tratamiento del dolor y nuestro objetivo es recuperar y/o mantener la función, además existen fisioterapeutas especializados en distintos campos e incluso especializados en técnicas concretas. Así que ante la duda, mejor preguntar.
Mi nombre es María y soy fisioterapeuta desde hace 20 años, puedes encontrarme en www.fisionor.es en el Paseo Marítimo Pablo Ruiz Picasso nº 12 de Málaga. Trabajamos patologías y disfunciones músculo-esqueléticas y además somos especialistas en uroginecología y obstetricia. Una interesante y maravillosa especialidad que ayuda en los casos de incontinencia urinaria y/o anal, prolapsos, dolor pélvico, disfunciones sexuales, molestias en el embrazo, recuperación posparto y un largo etcétera. Para cualquier duda puedes escribir a info@fisionor.es o llamar al 622 492 493.
Hacen una labor increíble y puedo dar fe de ello
Yo tuve hace tiempo un problema en la espalda y me trato una chica y mano de santo, que gran trabajo hizo
Pues felicidades a tod@s los terapeutas!!!
Yo padecía de unos problemas de cervicales y en la seguridad social no daban con la tecla hasta que un conocido me recomendo ir a un terapeuta que el solía visitar, y mano de santo….
Me uno a lo de decir que tienen «manos de santo» porque es una gran verdad, a mi me trataron de un problema en la cintura y me dejaron como nueva