Cómo evitar amistades tóxicas
En ocasiones mantenemos amistad con personas que no nos tratan bien y que no nos convienen. Comentarios sobre nuestro aspecto o nuestra personalidad, subidas de tono o dejarte en varias ocasiones plantado son algunas de las prácticas que llevan a cabo estas amistades. Saber identificarlas y poner tierra de por medio es a veces la mejor solución.
Es necesario tener en cuenta que no se trata de criminalizar a nadie, es posible que esa persona esté llevando a cabo esas prácticas por inseguridad, baja autoestima u otros conflictos. Pero es importante que recuerdes que, aunque quieras ayudar, tú no eres su saco de boxeo.
Un tipo de amistades tóxicas son aquellas que se victimizan. Si a ti te duele el tobillo, a ellos la pierna. Es usual que estas personas comparen su situación a la tuya de forma constante y te hagan sentir que tu situación “no es para tanto”. Sus problemas siempre serán mayores que los tuyos y es posible que llegue un momento en el que pienses que es mejor no hablar de ciertos asuntos con esa persona para evitar situaciones como esta.
Otro posible rasgo de una amistad tóxica es su afán de protagonismo. A menudo actúan como si tu mundo tuviese que girar alrededor de ellos. Debes tener en consideración sus sentimientos, pensamientos y vivencias; pero ellos no hacen lo mismo contigo. Es común que estas personas te hagan sentir de menos, por ejemplo, dejándote plantado en repetidas ocasiones sin siquiera avisar, para después excusarse con un “me quedé sin batería” o “me surgió algo urgentísimo”.
En ocasiones estas personas sufren, a veces sin saberlo, envidia hacia ti por cosas en las que consideran que los superas, por ello van a tratar de restar importancia a tus logros y señalar tus fallos.
Los comentarios negativos en tono jocoso o pasivo-agresivo sobre tu aspecto físico o tu personalidad son otras de las situaciones recurrentes en una relación tóxica. Cuando esto sucede suelen ser tan sutiles que en ocasiones quedan disfrazados de consejos que son “por tu bien”. Si esta situación se prolonga puede desembocar en problemas de autoestima y provocar que dejes de hacer cosas que antes te hacían feliz. Un ejemplo sería que te comentase que “tienes las orejas demasiado grandes, cuando te recoges el pelo te queda mal” y que, por consiguiente, dejases de recogerte el pelo.
Saber identificar estas conductas es, sin duda, lo más importante y difícil, sobre todo porque en la mayoría de las ocasiones proceden de personas muy cercanas y queridas. La forma más fácil de saber si esa persona no te conviene es observar como te hace sentir durante un periodo de tiempo. Es posible que en momentos puntuales, por una discusión o porque se tenga un mal día, una persona nos haga sentir mal, pero eso no quiere decir que sea tóxica. Las relaciones tóxicas rara vez se perciben al principio, solo el paso del tiempo nos puede ayudar a identificarlas.
Estas relaciones pueden llegar a derivar en problemas tan serios como el maltrato, es necesario que evalúes el grado de toxicidad de la amistad que mantienes. Algunas pueden llegar a salvarse si hablas abiertamente de ello y esa persona se muestra dispuesta a mejorar sus hábitos.
En cambio, la solución a otras suele ser alejarse, iniciar tu camino en solitario y, poco a poco, reponerte de esta mala experiencia. Puede ser que esta solución provoque un sentimiento de culpabilidad. En algunos casos sería conveniente acudir a un profesional que te ayude a gestionar esos sentimientos. ¡Pero debes recordarte que no es tu culpa, que nadie tiene el derecho de tratarte mal y que puedes vivir sin esa persona!
Autora del artículo: Ana Eva Jiménez
Vaya tema delicado, yo de joven tuve una amiga así, y lo pasé muy mal, además creía que nunca se acabaría. De este tipo de personas, con solo olerlas, hay que salir corriendo.
En nuestro entorno de amistades tuvimos a un chico así y desde luego que absoben la energía de aquella persona a la que supuestamente tiene más apego
Personas así a mi lado nunca he querido, con lo positiva que yo soy!!
Este tipo de amig@s contra más lejos mejor, no quiero personas así a mi lado ni en pintura, son capaces de desquiciarte de una manera brutal
Como se dice al principio, lo mejor en estos casos es poner tierra de por medio, porque te toca alguien así y te aburre la vida!!
Desde luego que este es un tema muy complicado, porque dependiendo del carácter de la persona puede ir a peor, tal y como se dice en el artículo, y derivar en algo que nadie quiere padecer.
Encontrarte dentro de una relación de este tipo, puede acabar costandote la salud
Muy mal asunto lo de este tipo de amistades, porque como caigas en manos de una persona así, mal pinta la cosa