El Día Mundial de la Diabetes fue instaurado por la Federación Internacional de Diabetes (FID) y la Organización Mundial de la Salud (OMS) ante el alarmante aumento de los casos de diabetes en el mundo. En las dos últimas décadas, la diabetes mellitus tipo II (DM2) ha aumentado de forma paralela al incremento de la obesidad, una patología que se da, sobre todo, debido a la mala alimentación en la población infantil.
Cada vez es más frecuente el diagnóstico de esta patología en niños y adolescentes a causa del alarmante aumento de la obesidad infantil que se ha registrado en los países occidentales
Ante esta situación, especialistas en Pediatría del hospital Vithas Xanit Internacional de Benalmádena (Málaga) recuerdan la importancia de controlar la obesidad, sobre todo, en niños para evitar el desarrollo de patologías como la diabetes mellitus tipo II. “Aunque la diabetes mellitus tipo 1 (DM1) sigue siendo la causa más frecuente de diabetes en la infancia, el aumento de casos de DM2 y de estadios prediabéticos como la intolerancia a la glucosa o la glucemia basal alterada han sufrido un aumento alarmante en los países desarrollados”, explica la Dra. Patricia Sierra Gutiérrez, pediatra diabetóloga. “La DM2 tiene un pico de incidencia entre los 12 y 16 años y se produce fundamentalmente por factores como la obesidad y la resistencia a la insulina, hormona que regula los niveles de azúcar en sangre. Otros factores de riesgo de presentar DM2 son la etnia, los antecedentes familiares, el alto o bajo peso al nacer y la diabetes gestacional en la madre”, añade la especialista.
“Además, la DM2 en la edad pediátrica supone la aparición de complicaciones agudas y crónicas más frecuentes y precoces que en otras edades como son la retinopatía (causa de ceguera), enfermedad hepática, insuficiencia renal (que precisa diálisis), neuropatía (pie diabético, etc.). Estas complicaciones, asociadas a las patologías que suelen presentar estos pacientes (hipertensión arterial, hipercolesterolemia, …), supone una pérdida de esperanza de vida de 15 años”, explica la Dra. Sierra.
Apostar por unos hábitos de vida saludable
Los especialistas insisten en la necesidad de intervenir en determinados hábitos de vida, fundamentalmente nutricionales, para el tratamiento de la diabetes en niños. “El fomento de la cocina tradicional mediterránea, evitar el picoteo o evitar el consumo de alimentos ricos en azúcares refinados son algunas de las pautas a seguir para tratar y, sobre todo, para prevenir la aparición de esta patología”, señala la pediatra, quien añade que “se debe enfatizar la necesidad de una dieta sana para toda la familia y, aunque el estilo de vida actual implique horarios que dificulten compartir horas con los hijos y un menor control de los hábitos alimenticios de los adolescentes; además de la existencia de una publicidad y presencia excesiva de alimentos procesados que tampoco ayuda, hay que intentar promover desde los centros educativos la importancia de las medidas preventivas para el desarrollo de enfermedades crónicas”.
Especialistas en pediatría de Vithas Xanit Internacional nos recuerdan que comer de una forma sana y saludable, así como la realización de ejercicio físico, son fundamentales en la infancia para prevenir la aparición de enfermedades crónicas como la diabetes
Otra de las claves para para la prevención de esta enfermedad es practicar ejercicio físico moderado diariamente. “Debemos limitar el tiempo que los niños y adolescentes pasan delante de la televisión y de las videoconsolas, ya que, actualmente, sólo un tercio de los adolescentes europeos consiguen alcanzar la recomendación de realizar 60 minutos de actividad física moderada al día. La actividad física, aparte de mejorar el peso corporal, aumenta la sensibilidad a la insulina, por lo que debe hacerse hincapié en estos pacientes recordando que, aún con falta de tiempo, podemos hacer pequeñas acciones para cambiar nuestros hábitos sedentarios, tales como subir o bajar escaleras en lugar de coger el ascensor, ir al colegio o instituto andando, bajarse en una parada de autobús anterior a la que nos corresponde, bailar, etc.”, afirma la Dra. Patricia Sierra Gutiérrez.
La intervención en determinados hábitos de vida, como la alimentación, y la realización de ejercicio físico, constituyen los pilares básicos del tratamiento que, a veces, precisa la ayuda de fármacos, explica la especialista. “El manejo de la diabetes requiere de un equipo multidisciplinar que incluya al pediatra diabetólogo, al nutricionista, a los educadores diabetológicos y al psicólogo”.
Independientemente de que si es algo genético, la culpa es de la mala alimentación lo tengo muy claro, los padres y madres entre las que me incluyo tenemos que acostumbrar a nuestros hijos a comer de una manera sana.
Estoy contigo Inés, llevamos una vida muy acelerada y a veces no cuidamos nuestra alimentación y comemos cualquier cosa y eso al final se paga.