Clínica Fajardo: Cuando el alma y la belleza están en equilibrio
Entramos por la puerta de la Clínica Fajardo, donde su amplitud, limpieza y buen gusto por la decoración nos invitan a entrar. Una pareja que se encuentra en la sala de espera es invitada a pasar con una amable sonrisa por una de las profesionales, mientras en recepción nos comentan que Carlos, el director de la clínica, está finalizando su turno con un cliente y pronto nos atenderá en su despacho.
Carlos Fajardo tiene un reconocido nombre en Málaga, su clínica tiene una gran reputación acuñada durante trece años de trabajo y crecimiento. La pasión que este médico siente por su profesión se nota cuando comienza hablando de sus principios, de cuando era pequeño, pues es ahí donde nace su vocación. Proviene de una familia de tradición médica, empezando por su tatarabuelo y pasando por su abuelo materno, que fue quien le inculcó todos sus conocimientos sobre la medicina gracias a la tan buena relación que tenían ambos.
Y, aunque parezca increíble, Carlos estuvo preparando su MIR para dedicarse a la otorrinolaringología, pues trabajó como ayudante en la clínica de uno de sus tíos durante la especialización. Pero otro familiar adquirió el primer láser para depilación de Andalucía y pidió a Carlos que le ayudase mientras estudiaba para el MIR, siendo así como entró de lleno en el mundo de la estética y cómo descubrió que su destino no era ser otorrino sino dedicarse a la medicina del bienestar y la salud.
Progresivamente fue dejando una especialidad por la otra, llegando a pertenecer a la segunda promoción de España del máster de medicina estética. Ahora, sigue teniendo relación con ese master pues imparte clases en él, así como en otros relacionados con este campo. “Me gusta mucho mi profesión, pero más enseñar, compartir lo que conozco”, nos contaba así sus razones para seguir enseñando. Además, en la Clínica Fajardo siempre están abiertos a enseñar todo lo que saben, son muchas las personas que entran allí para aprender. Como ejemplo tienen a su actual doctora, quien fue hace cuatro años durante un período de seis meses a aprender a la clínica y ahora lleva allí un año trabajando.
La clínica se inauguró en 2006, pero Carlos ya llevaba una carrera de fondo de 10 años en la medicina en la clínica de su tío. Sin embargo, las ganas de volar, de ser independiente y ejercer de forma autónoma lo llevaron a querer crecer e inaugurar su propia clínica. Una gran inversión, una apuesta fuerte que lo llevó a tener que vender su casa para poder seguir adelante con su proyecto.
La cantidad de clientes que le siguieron desde la otra clínica fue una sorpresa para Carlos, él no podía decir que se marchaba ni comentar nada de su nuevo proyecto, pero al comenzar a hacerse publicidad, los pacientes que él trataba empezaron a llamarle, pues solo lo querían a él como profesional. Es por esto que la inversión inicial fue más grande de lo que esperaba, tuvo que comprar diez equipos de láser para poder hacer frente a la demanda de sus pacientes. Ahora, tras trece años con la clínica, no se arrepiente de haber tenido que vender su casa pues cada vez son más los clientes que se van satisfechos y felices.
Y Carlos nos contaba que, aunque siempre dan el 100% de su profesionalidad para que los pacientes estén contentos, con el cambio que ha ido teniendo la sociedad, las personas son cada vez más difíciles de contentar.
Pero la Clínica Fajardo no es solo una, sino que son tres en una, pues cuentan con tres partes: Medicina estética tradicional, tecnología con láser y cirugía capilar y tricología. Sin embargo, Carlos nos confesaba que para él su parte favorita siempre ha sido la láser, pues cada paciente lo ve como un nuevo reto que afrontar, ya que la medicina estética tradicional le resulta más sencilla. Él, como médico que es, también le gusta sentirse como “un médico de verdad”, pues normalmente a su especialización no la consideran medicina como tal. Es por esto que la parte del láser es su favorita, pues suele atender a personas con problemas, no sólo estéticos, sino también de enfermedades.
Y por esto que decimos, espera que el concepto de medicina estética acabe evolucionando al de medicina del bienestar y salud, dejando atrás las banalidades de la especialidad. Pues no solo hacen tratamientos estéticos, hay problemas como pueden ser las varices, las parálisis faciales o algunos tipos de alopecia que también se tratan en esta especialidad y que hacen la vida de los pacientes más fácil o posible. Es por esto que los profesionales de este campo esperan que la sociedad deje de pensar en la medicina estética como tal y vea el trasfondo que hay y se valore por todo lo que hacen.
En Ciudad con Alma hemos aprendido mucho sobre la medicina del bienestar y la salud gracias a Clínica Fajardo, pues nos han mostrado el alma de la clínica y los profesionales como Carlos que están detrás de este nombre tan reconocido. Y algo que resume muy bien esta entrevista es su lema: “Salud y belleza en armonía”.
Autora de la entrevista: Noelia Ruiz
Pienso que cuando un profesional hace bien su trabajo, como es el caso, el resultado solo puede ser positivo.
En esta especialidad de la medicina, la profesionalidad debe de ser un factor determinante, y por lo que he podido leer, en esta clínica tienen mucha profesionalidad y eso es signo de confianza.
Hay una cosa que dice que me parece muy interesante, y es que le gusta compartir lo que sabe. Eso es de ser una persona generosa.
Estoy totalmente de acuerdo con lo que indica Remedios acerca de la profesionalidad, esta debe de ser la insignia ya que eso de cara a un paciente es vital. Por cierto, muy bonita la clínica.
Después de leer la entrevista, he deducido que es un hombre hecho a si mismo y que está donde está porque ha sabido lo que quiere.
Para mi un médico debe tener pasión por su trabajo y por lo que hace, y este hombre se ve que la tiene y mucha y eso es fundamental.
Apuntan en algunos de los comentarios que la profesionalidad debe de ser un factor determinante, cosa que comparto y yo añadiría también la ética.
Jorge apunta a que un médico debe de tener pasión por su trabajo y eso en medicina es más que prioritario. Y por lo que se desprende de la entrevista este doctor disfruta con su trabajo y eso, seguro que lo agradecen sus pacientes.