ROCÍO MADRID. ACTRIZ.
“Es muy frustrante que cada año me llamen para ir a La Isla de los Famosos”
La siguió y la consiguió. Y hoy podría vivir del cuento. Pero la actriz malagueña Rocío Madrid tiene claro que en su hambre, manda ella. Una frase de Eduardo Galeano que está en su cabecera. Así nos lo declara a Ciudad con Alma y a Talentos de Málaga, en una sincera entrevista.
Ciudad con Alma – ¿Te ha pesado el personaje en el que te llegaste a convertir en Telecinco?
Podría haber explotado más la oportunidad que me dio Crónicas Marcianas. Pero allí cada uno tenía un rol definido. Lo que pasa es que, después de eso, para el camino que he querido tomar… no sé si ha sido más un daño que un beneficio. Vivimos en un país en el que las etiquetas van por delante de todo. La gente que decide, no toda, pero si mucha sigue pensando que soy la misma pizpireta de la que todo el mundo se ríe. Al principio, me indignaba. Todo lo que me salían eran proyectos relacionados con la prensa rosa. Agradeciéndolos, los rechacé. Me siento actriz. Quería reconducir mi carrera. Sabía que en el mundo del corazón no me faltaría dinero ni exposición pública; pero, es mi prioridad. Cambié de representante, pillé a uno de interpretación y después de tanto tiempo no está siendo nada fácil. Se valora más una portada en ¡Hola! que hacer un buen piloto. Pero a cabezona no me gana nadie. No estoy en el punto mediático que podría estar y podría ser más rica. Pero los sueños que he cumplido y la familia que tengo no tienen precio.
CCA – Ha pesado, entiendo.
Es muy frustrante que cada año me llamen para ir a La isla de los famosos. ¿Por qué no me ven con un personaje en una serie? Analicemos el cine español, ¿entre cuántos actores se reparten todas las películas?, ¿ocho? Es una apuesta segura. Si te has creado una imagen guay y anuncias cremas o colonias da igual si eres mejor o peor actor. Vendes.
CCA – No has parado de hacer musicales… ¿en qué andas ahora?
Terminé con The Hole 2 hace poco, que ha sido una experiencia durísima por su exigencia, y ahora voy al Festival de Teatro Clásico de Mérida, con La Bella Helena. Es un ‘remake’ de un clásico, más actual y moderno. Además hay otro proyecto importante, también musical. Aún no se dice.
Talentos de Málaga – Naces en Málaga, te apellidas Madrid y vives en Barcelona. Son ciudades que te marcan.
Empecé en Madrid. Me fui con una mano delante y otra detrás. Pero la gran oportunidad me la dio Barcelona. Tengo que dar gracias a mi inconsciencia. Ahora vengo a otra Málaga. Aquí estudié jardín de infancia, danza y solfeo. Antes Málaga no ofrecía las oportunidades que ahora.
TM – Si te hubieras quedado en Málaga, ¿a qué te dedicarías ahora?
No tengo alma de estar quieta. Tendría empresa propia. Soy creativa y restauro muebles.
CCA – Te has referido a la transformación de Málaga, ¿cómo la encuentras?
La Málaga que me encuentro es una maravilla. Las cosas se han hecho muy bien. Es una ciudad en efervescencia. Por cierto, que en agosto me vengo a vivir a Málaga otra vez. Con mi familia.
TM – ¿La necesitabas?
Amo la ciudad y a su gente. Hace unos años empecé a sentir necesidad de volver. Pudimos encontrar el momento y tomar la decisión y estoy muy contenta. Está la deuda pendiente con los actores. Málaga le está ganando en muchos planos a Sevilla, pero en teatro vamos unos pasos por detrás. Sevilla tiene un circuito de teatro para actores sevillanos, que enlazan una función con otra. Sería un buen modelo a seguir.
CCA – ¿Crees en las casualidades?
A medias. Esto es un debate que tenemos mucho [señala a su madre]. Ella siempre me dice que he tenido suerte. Y yo no estoy del todo de acuerdo. La oportunidad llega cuando se cruza la preparación con el momento adecuado. Si no me decido a irme a Madrid y hacer pruebas y seguir estudiando… pues probablemente no tendría la carrera que he tenido. Quien la sigue, la consigue.
Entrevista: Princesa Sánchez y Miguel Ángel Magnani
Fotografía: Antonio Hurtado